¿Qué pasa, brujis? ¿Cómo va la cosa? ¿Feliz de recibir este Astroboletín?

He vuelto a las andadas y lo estoy redactando desde un vagón de tren abarrotado mientras atravieso una Alemania otra vez veraniega —y tormentosa. El aire a veces se carga de electricidad y en esta semana no paré de ver relámpagos dibujados en el cielo: un poco Urano todo, que era, de hecho, el planeta que cuadraba el último novilunio, novilunio.

El jueves pasado tuvo lugar un taller muy lindo de Astrología para Dummies —y fue muy divertido conocer caras nuevas; pero también reconocer rostros antiguos de talleres y consultas, ¡e incluso de Berlín!

Hablando de Berlín —y en el caso de que andes por la capital y te apetezca— en septiembre voy a cooperar con el espacio Sinapsis e impartiré un taller de Astrología para principiantes. Esta vez será en carne y hueso, como a mi me gusta: te dejo en el enlace por te animas y también el resto del programa que ya verás qué completo es.

¿Qué más te cuento? Este jueves tendrá lugar el Taller de Saturno en Piscis —sold out, brujis— y hasta final de mes aún estás a tiempo de anotarte a alguno de los cursos de Astrología para que aprendas a tu ritmo: sobre el zodiaco, los planetas, las casas. Cada curso con un montón de material visual y sobre todo con mis rizos morenos y mogollón de casos y ejemplos de tropecientas cartas de gente de carne y hueso y también de mis consultas. ¿O de qué sirve soltarte un rollo teórico sino lo ponemos en práctica?

Luego en septiembre empezaremos con el lanzamiento del curso 2023/2024 de La Escuela Cósmica, para quienes quieran aprender ya como profesionales: han pasado por la Escuela tarotistas, brujas, psicólocxs, reikistas, magxs… y profes y fisios y de todo. Me consta que de la última promoción se ha montado un grupo de astroloquitxs que son la hostia de buenos y buenas con las predicciones.

Yo ya te aviso. Así tienes todas las opciones.

Y ahora vamos con la semana.

Viene potente: como viene, de hecho todo el final de agosto. De hecho, ya estamos en el último tercio y vamos a experimentar un cambio poderoso de intereses y giros notables.

No lo digo: lo dice el Cosmos ahí arriba y sus jaleos y cambios planetarios. Empieza a tomar nota:

Atraviesa conmigo el lunes con su Luna en Libra y en Escorpio (retorno lunar mío asegurado) —y acompáñame al martes 22 porque ya empieza a ponerse la cosa simpática.

Por un lado, Venus le cuadra a Júpiter: y ojo, que es una cuadratura muy deliciosa —en el grado 15, de Leo a Júpiter y sin los divorcios de Urano— que invita a la reconciliación, a hacer las paces, a festejar, a gastar, a compartir y confiar en las relaciones y en la armonía.

Este es de los aspectos más agradables del mes: es verdad que la Luna desde Escorpio la tensa un poquito pero quienes tengáis algo por la zona leonina o del torete, e incluso quienes quieran vigilar su casa Libra en general, van a experimentar un colchoncito de felicidad (que a fin de cuentas, el Cosmos también va de eso).

Piensa porfa que VENUS SIGUE RETRÓGRADO: o sea, que algo del pasado resuelve (en función de tu carta). O, si no lo resuelve, desde luego lo replantea.

Marte además, ese día, se opone a Neptuno, desde Virgo a Piscis: esta tensión ya es un pelín menos simpática. Lo hace casi en el grado 27 —podrías vigilar, con mucho cariño, qué tienes por ambas casas enfrentadas porque ahí se va a dar cierto dilema, sobre todo si tienes planetas en la zona (¡obvio!).

Como Marte es trabajo y Neptuno las musas: pues trabajo artístico, vale, sí. Pero no todo el mundo se dedica a la danza, al cine o a la medicina alternativa. Por otro lado puede dar problemas en tuberías, en el tráfico marítimo, cadáveres que flotan, hermanos o parejas que se intoxican o una falta de motivación de la hostia porque no se sabe bien cómo empezar, todo nos viene grande o la nube negra se te echa encima.

Ay, ay, la nube negra. 

Todo pasa. Pero también puedes bichear el grado 27 o similares de Géminis y de Sagitario, que pueden andar somnolientos, indecisos, torpes, drogadictos, creativos, mágicos… y crédulos.

El miércoles 23 sigue el carrete. Que el ritmo no pare, ¡¡no, no!!

El Sol pasa a Virgo: felicidades a —lo siento por lo subjetivo— a uno de mis signos favoritos del zodiaco. Los admiro, me han sacado de apuros, me llevo genial con quienes lo tienen de Ascendente y… bueno, algo hay que contrarresta mi Mercurio torpe.

En cualquier caso: tú vas a vigilar tu casa Virgo, que ya anda con jaleo, pero es que además vas a estar pendiente de todo lo que Virgo conlleva (desde salud a optimizar, a mejorar, a ser multitarea, a organización, a pragmatismo, a prudencia, a materializar, a tener un sentido crítico pero-porfa-no-tan-tan-crítico y al trabajo literario, intelectual, comunicativo, de servicios y de subordinación).

Te dejo dos artículos muy lindos para que los leas: este sobre Virgo y este sobre el Zodiaco constituyente de Kabaleb.

Te aviso además y desde ya que va a haber cierto flojeo, mini descenso de energía en esa zona Virgo y en sus motivaciones aunque sólo sea hasta final de mes. ¿Y por qué? De nuevo, no lo digo yo: lo dice el Cosmos.

Nada más ingresar el Sol en Virgo y el jueves 24 Mercurio inicia su retrogradación: y claro, justo además es en esta semana donde se pone retro y un poco más torpe, esto y lo otro.

No es gran melodrama. ¡En absoluto! Además, Mercurio está fuerte en Virgo. Pero sí nos obliga un poco más a prestar atención a los asuntos de Virgo y de esa casa de tu carta natal. Mercurio comienza su retrogradación casi en el grado 22 de Virgo y no se estaciona directo hasta el día 15 y en el grado 8. 

Le va a dar tiempo a juntarse con el Sol, dibujarle trígono a Júpiter y varios aspectos muy geniales así que úsalo a tu favor aunque te de un poco de problema con la tecnología, mascotas, servicios y viajes.

Lo mismo se retrasan negociaciones —acuerdos, pactos, temas con niños, libros de la escuela, formaciones, desplazamientos— pero Virgo es muy bien hecho —aunque no es paciente, es neurótico y nervioso por la mutabilidad. Si se trabaja la paciencia en esa área, le va a quedar una joyita de buenos resultados, acuerdos, textos, organizaciones, limpiezas, dietas y todo lo que suponga en tu carta. 

Repito: hasta el día 15 y en el grado 8.

Luego el viernes 25 tenemos un trígono entre Marte y Plutón, de Virgo a Capricornio (en el grado 28). Marte está todavía bajo la oposición de Neptuno. Este es el cadáver que flota en el canal, la comida podrida que se olvidó no meter en el frigorífico, la charla con el terapeuta que destapa un par de mentirijillas y oscuridades.

Por otro lado, lo espiritual, mágico y creativo sigue flotando en el ambiente. Hay que añadirle un toque sensual o voluntarioso, un toque incluso económico: pueden surgir ideas para hacer dinero o para sacar tu negocio o tu emprendimiento a otro nivel. Marte y Plutón son muy sexys juntos. O muy intensitos. Están en trígono y pueden funcionar bien. Busca la zona de Capricornio con el grado 28: lo mismo ahí también hay noches de bohemia y de pasión.

Eso sí: desde ya se está sintiendo la tristeza, frío, resfriados, durezas y bloqueos de Saturno en Piscis. Sí, sí, el de los dolores de pies.

Si tienes algo entre los grados 0 y 7 de Piscis, Virgo, incluso Sagi y Géminis, mírate qué planetas son, o qué representan en tu carta, en qué casa te caen, ¡todo eso! Porque andarán algo estresados en la semana.

Después del cuarto lunar —que puede dar dolores en los ojos— y con la Luna en Capricornio, el domingo 27 el Sol se opondrá a Saturno desde Virgo a Piscis y por el grado 4.

Si la cuadratura entre Venus y Júpiter eran chachis, esta oposición entristece y agua la fiesta. Los abuelos y padres de familia —e incluso figuras capricornianas o acuarianas— pueden estar de capa caída o darnos un pequeño susto.

Los pies y parte del sistema linfático —aunque también podrían valernos cualquier sistema óseo que nos enraíza y nos mantiene estables— va debilitarse un poquito en la semana y tocará contrarrestarlo con calor y humedad, sus baños de piscinas y vapores (no muy profundos, que Saturno ahoga… pero esto ya lo detallo más en el taller).

Y… además:

El domingo Marte sale de Virgo ingresa en Libra. Va a estar hasta el 12 de octubre y, por supuesto, es un tránsito a vigilar en tu propia carta. Pero es verdad que, a pesar de no ser la mejor posición de Marte, este año no tiene a los otros planetas tan en su contra.

Te lo iré detallando.

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Y poco más. De aquí a poco llego a mi destino.

Que tengas feliz semana.

Cariños cósmicos y ahoi, ahoi.

Emilio

Imagen de Daniel Shapiro en Pixabay