Brujis, ¿qué tal? ¿Cómo vas de ese lado? Te pongo estas letras justo, justo, justo con el cuarto lunar activo desde Leo a Escorpio (o sea, Luna en Leo y Sol en Escorpio).

No sólo eso: Júpiter no anda lejos desde Tauro. Ni Marte, otra vez en Escorpio (ni Mercurio, también con su aguijoncito). Lo digo porque esta tremenda T Cuadrada —lo del nombre es lo de menos, lo que nos interesa son sus efectos— va a ser bastante clave para entender parte de la energía de la semana y… luego, ya en la siguiente, de la poderosa Luna Nueva Escorpiana (novilunio, novilunio).

Me decía el otro día una consulta de este signo —bueno, con un stellium en Escorpio, de ahí que tuviera mucho más peso— que, o las cosas tenían profundidad o se aburría: o las cosas tenían misterio y pasión, o le resultaban de mal gusto.

Y es que es cierto que Escorpio su ratito de ego: su exclusividad, que no va tan alejada del resto de signos fijos (Leo, Acuario y Tauro), aunque cada uno lo manifieste a su manera.

En el caso de Escorpio, sí habrá cierta comprensión y talento terapéutico y memorioso (cosas del agua y de ese torbellino emocional que contiene).

La contención —y la producción, en el sentido de manufacturación, casi de industria de serie, de objeto físico, de actividad llevada por largo tiempo (piensa en un Andy Warhol, con su Sol y Ascendente, Mercurio y Venus en Leo y su Júpiter y Marte en 10 en Tauro) es una atributo característico de los signos fijos.

Y estamos, volviendo a nuestra T Cuadrada y al cuarto lunar, en un momento bien cabezoncito, productor, que sostiene y que trabaja y va a lo suyo.

Esto luego va a dar sus frutos —y a pasar su factura: es decir, vamos a ver cuerpos resentidos de tanto trabajar, gastos que se nos van de la mano, ganancias repentinas, discusiones gordas y enconadas, jaleos en los foros y en los aeropuertos —y alguna obra que se materializa o reconoce (eso que se manufactura, desde un libro a un vestido a un aumento de sueldo o un viaje o una charla) o una terapia que surte efecto —una terapia mágica o psicológica o profunda o energética (recuerda: Escorpio, y más Escorpio).

Además, este semana trae un ingreso muy lindo —genialísimo— que es Venus en Libra. Y tendremos a Saturno en Piscis activo y volviendo a complicar los mares y las farmacias.

Venga, vamos al lío.

Vamos primero al lunes 6 y al trígono muy simpático de tierra entre Venus y Plutón, de Virgo a Capricornio. Ya mencioné que este Venus en caída no se lo está pasando tan mal este año (mal en absoluto) y ha dado sus alegrías y encuentros a todos los signos de tierra e incluso a Cáncer.

O sea, que ha traído su toque festivo y protector —y quién sabe si incluso de ganancias económicas (no sólo por Venus per sé, sino y sobre todo por su combinación tan estupenda con Júpiter).

En este caso, tendremos a un Venus y Plutón en el grado 28: para darle intensidad a tus relaciones y un toque nebuloso y sexy. Eso sí, Venus va perdiendo un poquito de dignidad (ya no tiene los amparos de la semana pasada) así que ojito con las fiestas, los revolcones e incluso con lo que se compra… que lo mismo te gusta hoy pero luego ni te lo pones.

Como el trígono ya anda activo esta semana, creo que puede prometer cierto encuentro interesante: incluso reencuentro con amantes antiguos y amistades que hace tiempo que no ves.

Además, el mismo lunes ingresa la Luna en Virgo: esto da un poco de dolor de pies y revuelo en hospitales, farmacias y mares. Cuidados y administraciones, mascotas tristes y reparaciones que se demoran. La recaída de un viejito. O una viejita. La mujer del mundo de las letras que nos dice adiós.

Hablando de letras —o de Mercurios—, el martes 7 tendremos a Mercurio en  trígono a Neptuno (más adelante le hará un sextil a Plutón).

Todo sucede ya a finales de Escorpio —y en este caso, de Piscis, justo en el grado 25 (y con un poco de suerte ya sin el estrés de Urano). Sabes que a veces parafraseo a Freud —ese que recetaba coca a sus pacientes— cuando decía algo así como que la palabra puede sanar.

Y, desde luego, el trígono entre este Mercurio y Neptuno puede ser una buena herramienta para conversaciones del pasado, heridas, memorias, visitas a lugares energéticos, baños de mar espirituales… y estudios y escritos artísticos, cinéfilos, tarotistas. Buena intuición, buena conexión, mente algo peleona pero comprensiva y cuidadora. Si vas a ir a adoptar a un animalito, ese día querrás rescatarlos a todos.

De hecho, el Mercurio seguirá activo al día siguiente: el estudio, la comunicación fuerte (honesta, visceral) y la organización andarán poderosos en la primera mitad de la semana.

Sigo. El miércoles 8 tenemos un super ingreso. Venus en Libra. De lo mejorcito de la semana —me atrevo a decir del mes.

Descanso para esos librianos y librianas —me vale también y mucho en el Ascendente— que han tenido un octubre duro con el eclipse, pérdidas de seres queridos o despedidas un tanto torpes.

Si no eres Libra ni tienes nada por la zona, tranqui, que siempre puedes sacarle partido buscando tu casa Libra: ahí llega un soplo de dulzura intelectual, de arquitectura, de museo, de buen gusto, de comodidad, y de amor y asociaciones.

Venus se conjuntará al Nodo Sur en algún momento —y eso puede ser un momento algo crítico (habrá también cuadratura a Plutón). Pero vamos, que tenemos, de entrada unas semanas en noviembre muy lindas para disfrutar este tránsito, organizar tus tareas con respecto a tu casa Libra y demás.

De hecho, también le va a suponer un alivio a los Géminis y Sagi del primer decanato que están ahora —y estarán aún bastante resentidos con Saturno concentrando su energía desde Piscis y despertando muy despacio.

Así que bravo por Venus en Libra.

De hecho, aprovecho ya que estamos para anunciar por aquí mi curso de Saturno en Piscis —que lancé este viernes pasado, está teniendo super buena recepción y hasta me llegaron ya los primeros piropos del alumnado.

Me alegro, entonces, que estéis confirmando que el curso mola.

Gracias, gracias.

Son dos modalidades y aquí tienes el temario, duración de los vídeos y fecha extra para la tutoría por Zoom.

Curso Avanzado Saturno en Piscis 2023 – 2026.

Curso Avanzado Saturno en Piscis 2023 – 2026 con Encuentro en Vivo vía Zoom.

Además que, ahora que Saturno despierta, más vale ponerse al día de lo que nos depara: no sólo en tu casa Piscis, sino en conexión con el resto de tu carta natal. Para que no te lleves decepciones —organices bien tu agenda, sepas dónde buscar apoyos y en qué fechas conviene respirar, apretar los dientes, poner los pies en remojo o pasar un día en el campo.

Por cierto, que el miércoles también tendremos otro aspecto de Mercurio, siempre desde Escorpio y desde sus últimos grados: sextil a Plutón en Capri. O sea, que Mercurio anda muy fino, eficiente, sanador y buscando buenas conexiones durante toda la primera parte de la semana.

Claro, la cosa comenzará a completarse a partir del viernes 10.

Mercurio ingresa ese día en Sagitario —no su posición más objetiva— y en seguida se cuadra a Saturno: lo que deprime, da conflictos en las fronteras, pone triste a las escuelas e institutos y da accidentes a caballo y en el mar. Pérdidas y malentendidos comunicativos. Hermanos y vecinos con problemas en el hogar o en las caderas. Fugas líquidas. Tuberías que hay que reparar. Taxistas accidentados.

A eso hay que sumarle que el sábado 11 la Luna entra en Escorpio —dispuestísima para Luna Nueva, novilunio, novilunio, que sucederá ya la próxima semana— y tendremos a Marte opuesto a Urano desde Escorpio a Tauro.

El grado te lo tienes que saber de memoria. El 21 (Tauro, Escorpio… ¡Leo y Acuario) y el aspecto es tenso, no me cuentes historias. Así que días para bajar las revoluciones, no dejarnos llevar por los extremos —la combinación de Urano y de Escorpio da fundamentalismo de cualquier credo, y con Marte, inflexibilidad, pólvora, aviones, chispas, electricidad, ciberataques—: y con un poquito de mano izquierda cortar con cosas que no sirvan, actividades que nos hagan más mal que bien, relaciones, deportes, temas del trabajo… etc.

Eso sí, repito: hace falta mano para que el corte duela lo menos posible. O para que sea limpio, preciso y no salpique.

Grado 21, te lo repito (signo fijo —y en tu carta natal, que es la que manda).

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¿Alguna cosa más?

Esta vez poco más que añadir. O quizá, lo de siempre: que me ayudas MUCHO compartiendo, sumándote a la newsletter con el regalo del Manual de astrología, difundiéndome, regalándo(te) una sesión conmigo y por supuesto formando parte de mi Escuela Cósmica. Ahora con la nueva formación de Saturno en Piscis.

Recuerda que los astros inclinan, pero no obligan. Y que no te creas esto que te cuento ni mucho ni poco: bájalo a tu carta y a tu alrededor.

Y, por supuesto, que tengas una felicísima semana. Ahoi, ahoi,

E.

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