¿Qué pasa, brujis? Aquí, otra vez de Astroboletín que andamos.

De hecho, no sé hasta qué punto el momento se ajusta a la ritualística (sería un tema para estudiar con más detenimiento) pero te estoy redactando estas líneas mientras se produce la conjunción partil —exactísima, el cazimi, vamos— entre el Sol y Marte.

O sea, que ambos están justo mientras tecleo estas letras, en el grado 25 de Escorpio y en el minuto 50 —los segundos no te los digo, porque no lo sé. Y es que la descripción del aspecto es mega bellísimo: Marte se encuentra en el corazón del Sol, algo así como amparado, seguro, purificado y llenándole de power. Vamos, que le ha hecho un reseteo a Marte y a sus burpees y a sus ayunos intermitentes y todas esas mandangas de la hostia.

O lo que es lo mismo: Marte va a estar en estas primeras fechas que va a querer comerse el mundo, pelear por ser rey, proclamarse presidente o generala, entrenar, darle duro a la autoestima, a su deseo y a su honestidad (eso desde el lado bueno; el otro es el que roba, pega, usa armas de fuego y patatúm, pim, pam).

Puedes echarle un vistazo a este vídeo donde explico un poco mejor el evento. Y siempre compararlo con tu propia carta, que es la que manda (y no sólo con tu casa Escorpio; sino también con tu casa Leo y Aries).

Y, si te queda muy grande, ya sabes que siempre puedes echar un vistazo a mis servicios y consultas (eso sí, te tocará esperar un poquito porque se me llena la consulta en seguida y tengo lista de espera).

Total. Que bellísimo Marte Cazimi, bellísima Venus en Libra —por ir buscando cositas guays en el cielo. ¿Y qué más bellísimo?

Pues… a ver: bellísima siempre es la temporada Sagitario. Que para eso es signo regido por Júpiter, ¿cierto?

Pero… Peeeerooo… (y tú sabes que a mi me gusta llamar a las cosas por su nombre). Este año pues tendremos un ingreso de temporada un poco más jodido.

¿Por qué? Pues obvio. Bueno: super obvio y, encima, más agitado. Resulta que tenemos por ahí, por el grado a 0 a Saturno en Piscis fastidiando a los signos mutables (Sagitario incluido). Pero es que, encima, tienes que echarle que Marte ingresa también en el Centauro.

Y, no me cuentes rollos, pero Marte y Saturno se llevan un poco regular.

¿Conclusiones? Pues un poco de jaleo para los signos mutables que habría que vigilarlo.

Pero bueno, mejor le metemos mano a la semana: ¿te parece?

Venga, vamos al lunes 20 y al cuarto lunar —en Acuario— y que ya la semana pasada te avisaba que me gustaba poco. Más que nada porque funciona como recuerdo, campanazo, alarma, pinchacito de los posibles disgustos y dolores del novilunio, novilunio.

¿Que la Luna Nueva te pasó sin pena ni gloria? Pues genial de la vida. ¿Que sí te removió temas de salud, viejos, hogar, madre e independencia o te rompió la rueda del coche? Pues listo. Algo más por ahí se tiene manifestar.

De hecho, el lunes pinta un poco tristón o de hacer tripas corazón: por llantos, dolores de pies, desengaños, y cierta hipersensibilidad —como un gatito atropellado o una artista sensible e incomprendida. O un anciano que se cae saliendo de la panadería.

Eso sí, el cielo aún andará bajo los auspicios de la conjunción del Sol y Marte —y tendremos al Sol desde Escorpio en sextil a Plutón (pero esto, de nuevo, lo comento en el vídeo que ya te enlacé).

Primero será el Sol el que toque a Plutón —con su voluntad y transformación sexy… empatía desgarradora y poder y justicia terapéutica— y luego se sumará al sextil Marte.

Siempre desde Escorpio, cierto, y el martes 21.

Y siempre por los mismos grado por si quiere vigilarlos: el grado 28, de Escorpio, de Capri; ambos así más afectados (para bien, esperemos). Pero podríamos buscar sus efectos a finales de Virgo también o de Tauro. E incluso empezar a asomarnos a los primeros grados de Acuario y de Sagitario.

De hecho, con Sagi empezaremos en seguida. O sea, el miércoles 22. Y con el ingreso del Solete en Sagitario. Piensa que a Sagitario lo rige Júpiter y es de fuego y es mutable. O sea: expansivo, Yang, dudoso, filosófico, bruto, honesto, generoso, egocéntrico, un super profe y un tanto sermoneador y moralista. Exagerado. Y de los que a veces les cuesta poner límites: porque… para qué beberte una botella de vino cuando puedes beberte cuatro.

Pues esos nativos y nativas son los que cumplen en estas fechas —y hasta el 21 de diciembre.

De hecho, puedes plantearte si no has visto ya a esos Sagi con problemitas de ciática, de cintura  o rodilla. Con cierto bajoncillo de salud. Obligaciones. O algún problemita en el curro o con el padre.

¿Y esto por qué? Pues una parte se deberá, sin duda, a las trastadas de Saturno en Piscis —de hecho, ya sabes que tienes un Curso sobre Saturno en Piscis cojonudísimo al que puedes apuntarte y donde te detallo muchas cosas no sólo para los signos mutables, sino un montón de tips, análisis de cartas astrales y, por supuesto, fechas clave para organizar tu agenda.

En cualquier caso, quédate con que —a diferencia de otras temporadas Sagi, tan festivas y carnavaleras— esta llega un poquito más manirrota, torpe, asustadiza y accidentada. (más detalles, en el curso, que también yo tengo que pagar el alquiler ;-).

Y no es para menos: el Sol ingresa en Sagitario y se cuadra al momento con Saturno en Piscis el mismo jueves 23 y surgen tristezas, resfriados, dolores de ciática y esa responsabilidad apesadumbrada. Ese hacerlo porque no queda más remedio. Ese cargar con tu trabajo y encima con los jaleos en casa o de la mudanza o de tus hijos o de la pareja que está insoportable o triste o perdió el trabajo

No sólo eso, brujis: el viernes 24 Marte también ingresa en Sagitario. De hecho ya va a estar tenso y activo antes incluso de que cambie de signo.

Marte en Sagitario es deportista, viajero, amazónico. Es aventurero. Expansivo. Lo tiene Gael García Bernal (con su stellium sagitariano), Javier Bardem (y su madre Pilar también lo tenía); lo tienen Rihanna, Cate Blanchet, Janis Joplin y Steffi Graf (cuatro mujeres cuyas cartas analizamos en mis talleres). Lo tienen Angela Merkel y Marina Ibramovic.

A veces, con un Marte en Sagi sale pareja de fuera. O un hermano mayor que se va del lugar de origen. Da idealismo. Da cierta carcajada bruta y alta. Idealismo. Sabiduría… (y en su peor forma, fanatismo). Y da cierta capacidad de síntesis a la hora de actuar (pero también indecisión… es lo que tiene ser signo mutable).

En cualquier caso, todo este empujón energético no levantará las alas —o el galope— hasta la semana que viene y superada la Luna Llena en Géminis. Así que yo vigilaría los accidentes y el pasarse en las excursiones y en pasearse con el culo fuera.

Y más si tienes algo por la zona mutable de primeros grados: roturas, gastos indebidos, obligaciones que limitan, ¡que bloquean! Y los órganos dobles: desde brazos, piernas, manos, articulaciones… ojito con estos

En realidad, la cuadratura será oficial —entre Marte y Saturno— el mismo sábado 25, pero vamos, que ya me dirás tú a mí si no la sientes antes.

Estaré encantado de leerte aquí abajo 😉

 

***

¿Alguna cosa más?

Pues sí. Ve tomando nota.

¡Abrimos CURSO de PLANETAS en diciembre! Ya sabes, dos meses, clases grabadas y además encuentros por Zoom los martes a las 19.30 de la tarde. Super tallerazo —de hecho, lo ideal es empezar por los planetas o, al menos, así se hacía en Astrología Clásica y esto ya lo sabe quien estudia conmigo—: porque si no sabes bien qué significan Venus o Mercurio en tu carta, ¿a dónde vas ya preocupándote por tu Plutón?

Tienes para apuntarte y toda la info aquí.

Sigo.

El próximo sábado 01.12 daré un taller en The Yoga.Lab sobre la Astrología de diciembre. Es el segundo que imparto en este lugar tan especial. Pásate, que ya sabes que me siento muy a gusto dando clases —pero sobre todo dando clases presenciales. Info y suscripción a través de la maestra de yoga, Javiera, aquí.

Finalmente, quiero agradecer a esas alumnas y las nuevas reseñas del taller de Saturno en Piscis.

Las tienes todas aquí en este enlace pero te copio dos (para muestra, un botón). Esta, de la mano de Eva, que tiene la Luna en Piscis y —casualidad— trabaja en lo mismo que una de las personas que uso en mis cartas ejemplo.

“Lo estoy flipando con el taller de Saturno en Piscis, Emilio. Sobre todo con los ejemplos y análisis de las cartas: la de Kurt Cobain y la de tu osteópata son geniales. Sigo viendo el resto. Nos vemos en el Encuentro”. 

O te paso aquí a María, otra querida alumna:

“Me encanta cómo explicas, Emilio. Tengo que ponerme los vídeos varias veces de toda la información que nos cuentas. Y encima tomo apuntes. Voy a comprar una agenda. para apuntar todas las fechas que nos dices y usar mejor este tránsito”.

Existen dos modalidades para apuntarte al Taller.

Curso de Saturno en Piscis con 4 clases grabadas. Son clases intensas: la que menos dura, son 41 minutos. La que más, 91. Por eso te digo que raro es que encuentres algo tan prolijo, práctico, ameno y profesional. Para que aprendas a tu tiempo, repases, tomes nota, organices tu agenda (en el enlace te explico lo que detalle en cada clase)

Curso con clases grabadas (o sea, todo lo anterior) y, además, una tutoría (encuentro vía Zoom) porque da gusto reunirse, compartir, solucionar dudas y demás. Si no puedes asistir al encuentro, también puedes plantearme las dudas vía Email y yo las resolveré durante la cases.

Y ya se me queda poco más por añadir.

O quizá, lo de siempre: que me ayudas MUCHO compartiendo, sumándote a la newsletter con el regalo del Manual de astrología, difundiéndome, regalándo(te) una sesión conmigo y por supuesto formando parte de mi Escuela Cósmica.

Feliz semana. Cariños desde muy al sur de España.

Ahoi, ahoi,

Emilio

Imagen de Pixabay