El otro día mirando el cielo de septiembre, me decía: Joer, pues sí que me gusta la Astrología de este mes. 

Aparte, sucede que si el último tercio de agosto venía un poco marcado por el nubarrón, nostalgias, resfríos y bloqueos de la Luna Llena en Piscis —y ese Saturno, ay, ese Saturno— ahora en septiembre sucede como un giro de 180 grados.

Y es que vamos a vivir justo en el primer tercio una especie de subidón energético, de cascada de acontecimientos para bien —por supuesto y siempre que tu carta lo permita, obvio.

Sí. Septiembre me gusta —y tienes este especial para que organices tu agenda y lo compares con tu carta natal.

Y me gusta mucho esta semana —que podría ser como la más decisiva de todo el mes (aunque también es cierto que casi se puede decir de las siguientes semanas, sobre con el novilunio en Virgo y el ingreso del Sol en Libra). Pero ya lo iremos despachando conforme toque.

Ahora a darle a la lupa y al cotilleo a este Astroboletín.

¿Por qué me gusta tanto esta semana? ¿Qué la hace especial?

Para empezar, estamos con un Venus recién despertando que va a permitir que avance lo que sea que mueva en tu casa Leo —pero también en tus casas Tauro y Libra así como todo lo que Venus concierne. Citas, asociaciones, proyectos artísticos, retoques estéticos, armonía, amor, decoración y demás…

Además, se dispersa un poco la melancolía y dolores de pies torpes de la Luna Llena en Piscis (plenilunio, plenilunio). Y vale que seguirá dando guerra en esos grados sensibles de signos mutables… y vale que regresará. Pero aparecen manos amigas y cariños y placeres.

Además, la semana perfecciona las promesas positivas —que también las había— del plenilunio, plenilunio. O sea, todo ese tema de asociaciones, viajes, economía, conocimiento, fiestas, regalos, protecciones e invitaciones. ¿Cómo invierto mi dinero en el placer? ¿Cómo viajar o formarme? ¿Cómo monetizar lo que sé? ¿Cómo combinar cierta comodidad con trabajo y lo pragmático?

No es tontería. Ya lo he mencionado bastante en las redes: pero se abre una ventana práctica y fértil. De aprendizaje. Viajes. Colaboraciones. Retomar amistades. Grupos.

Eso sí, la semana trae un aspecto que, sin ser negativo, aquellos y aquellas con una carta jupiterina como yo quizá lo notéis: Júpiter inicia su retrogradación. No es ni mucho menos un melodrama, pero échale un vistazo: a la casa que te transite y ¡a los contactos que repite, que serán positivos!

Pero bueno, vamos con el Astroboletín.

Nos estrenamos el lunes 4 con la Luna en Tauro —y ese Venus desperezándose en Leo. Ya desde el finde se pueden potenciar las visitas a museos, parques, lugares bellos. El trabajo plástico, estético. Citas donde la diferencia de edad no es inconveniente. Mujeres lindas —o cabezonas. Reconciliaciones… y un poquito de sorpresas.

Además, el lunes ya estamos con esos trígonos de tierra tan potentes que vamos a vivir durante el mes —yo voy a estrujarles todo el jugo, ¿y tú?

Ve tomando nota.

Mercurio y su trígono a Júpiter: para que capitalices tu conocimiento, para que viajes para estudiar o filosofar. Para que contactes con maestros y con aprendices. Gente joven. Para que escribas, regales libros. O te lo pases bomba con los tuyos. Amplíes tu agenda de contactos y confíes en el poder y en la justicia en las palabras.

Suena bonito, ¿eh? Por no hablar del carácter reparador y optimizador del aspecto. O sea: que puedes contactar a especialistas que puedan por fin reparar algo que por ahí te esté quedando suelto.

Además, Júpiter empieza su retrogradación en el grado 15 de Tauro (en fin, que los signos de tierra del segundo decanato están que se comen el mundo: venga a ganar dinerito, recibir ascensos, pensar en viajes, renovaciones del contrato… y el disfrutar).

Aprovechadlo, brujis.

Reincido en que no es mala retrogradación: lo mismo si eres muy jupiterino como yo pues quizá te pone un poco más en modo reflexivo y tal (pero bueno, Júpiter en Tauro es también reflexivo y lento… o sea, que ni tan desafinado van).

Durará hasta el 31 de diciembre, cuando Júpiter despertará en el grado 5 de los toritos. 

Sigo.

Acompáñame hasta el miércoles 6 de septiembre, el día más mercurial del mundo mundial, por los siglos de los siglos, ahoi.

Claro, tenemos el cuarto lunar, con la Luna por Géminis —¿hola, dualidad?— cuadrando al Sol en Virgo —¿hola, encrucijada, bloqueos mentales, dudas, pero también multiplicación de oportunidades?

Justo en el grado 14. Quizá alrededor de este día se sienta con un poco de más fuerza la retrogradación de Mercurio. E incluso si no es nuestro ordenador el que falla, lo puede hacer nuestra cabeza y emociones: hay mucho embrollo, torpeza emociomental. O un querer abarcar demasiado. O estar triste y alegre al mismo tiempo. O recibir una noticia que nos da bajonazo y otra que nos pone las pilas.

Júpiter está por ahí amparando y trayendo buenas nuevas pero me preocupa un pelín la cuadratura: lo mismo es simplemente un problema con el jefe o una negativa a una propuesta. Quizá asuntos por la custodia de los hijos. Un accidente en una escuela. O gente joven por ahí en carreteras perdidas. O un malentendido tonto. Eso, o una pequeña indigestión o torcedura o metedura de pata. 

Además del cuarto lunar, Mercurio se unirá en su retrogradación al Sol ese mismo día: o sea, el cazimi de siempre. Que lo mismo te achicharra el cerebro que te trae la gran epifanía que tanto esperabas. ¿De pronto un escritor famoso o escritora o persona del mundo de la comunicación que salta a las noticias?

Finalmente, otro aspecto bien bonito de la semana lo tendremos el viernes 8 —la Luna domiciliada y felicísima en Cáncer, by the way— cuando el Sol y Júpiter se hablen en trígono, desde Virgo a Tauro y en el grado 15 (o sea, más alegrías para los signos de tierra de la zona… pero también incluso para los de agua; sobre todo el Cangrejito).

Dice Antarés de esta combinación —un viejo manual de Astrología que todavía viaja conmigo—: optimismo, confianza y expansión. Bondad y filantropía. Dignidad, respeto del orden y de la jerarquía, amor por el decoro, tolerancia. Suerte y éxito. Buena salud y protección de personas. 

Casi nada, ¿no?

Ya ves: si te toca algo, lo mismo tienes cierto golpe de suerte o de protección o de amiguismo o simplemente de comodidad y bienestar. Júpiter es todo lo que pueda sentirte que creces, te expandes, te sientes bien: llámalo dinero —que por supuesto lo significa—, llámalo viajar, llámalo familia o magia (un Júpiter en Cáncer, por ejemplo), llámalo como te dé la gana…

Y no sabes cómo llamarlo, pues búscalo en tu carta que seguro que te da un montón de pistas.

***

Por aquí un par de más novedades. Noticias crujientitas.

Una muy chachi es que  voy a dar un taller en vivo —en carne y hueso, de los que me gustan— el próximo lunes 25 de septiembre. Es un taller muy sencillo para gente que no tiene ni idea de Astrología y quiere asomarse conmigo, husmear en este arte tan guasón y divertido ¡y práctico!

No sólo es bonito el taller sino el espacio donde voy a darlo y la chica que me lo ha propuesto.

Te paso el dato: lo mismo quieres apuntarte (o compartirlo con gente que viva en Berlín). Yo encantado —encantando de encantarte— porque ya sabes, o si no, te lo digo ahora, que nada me gusta más que una clase en vivo y un tomarnos un vinito al salir de clase.

Taller en vivo en Berlin, Astrología para principiantes, en Sinapsis. Aquí algunos datos... y aquí.

(aprovecha también y bichea todo el genial programa que ofrecen).

Parece ser que además (mis velas y rituales surtieron efecto) voy a estar también impartiendo otro taller en vivo para la Luna Llena en Aries: en otro sitio maravilloso en Berlín. Pero como todavía no está el flyer ni el evento del todo cerrado, pues te toca esperar un poquito. Pero en cuanto lo tenga, te animo a pasarte: y ayudarnos a difundirlo. Muy emocionado con estos proyectos, claro.

Hablando de septiembre, tienes un especial sobre el mes aquí que siempre puedes bichear.

Finalmente, ya sabes que en septiembre vamos a tener 3 encuentros gratuitos, 3 clases sobre Astrología —muy, muy, muy chulas… de estas que te hace la cabeza pop corn— y que servirán de antesala para la matrícula al curso 2023/2024 de La Escuela Cósmica, que empieza en octubre. Y que es el curso de Astrología más chachi, mágico, práctico, queer, moderno, ravero, clásico y tradicional que puedas encontrar en la web.

Yo ya te aviso.

Estos encuentros gratuitos serán abiertos para todo el mundo pero vendrán con unos pdfs, así que si quieres recibirlos recuerda estar apuntado o apuntada a la lista: ¡a la comunidad!  Además, así tienes también mi Manual de Astrología para (no) tan principiantes. Estas fácil como hacer clic acá.

Muy feliz semana y que los astros te acompañen, brujis.

Ahoi, ahoi,

Emilio

 

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