Esta es una semana muy poliédrica. Ecléctica. Fractálica. Pluralísima.

Yo mismo con la lista de todos sus aspectos aquí delante no consigo buscar una mejor manera de definirla: quiero decir, hay de todo y todo vale y es importante.

No puedo decir: Es una semana pesimista porque el cuarto lunar toca a Saturno y luego el Sol también se le conjunta. No. Tampoco puedo decir: Es una semana mega mística y amorosa porque Venus se pasea dulce por la zona chachi de Piscis y hasta se conjunta a Neptuno. Tampoco.

Es más: tenemos el generoso y empático ingreso del Sol a Piscis, aspectos muy amables de Mecurio a Júpiter desde Acuario y a Aries, ¿pero no vamos también camino de una Luna Nueva —novilunio, novilunio— ya la semana siguiente y de nuevo con otro montón de Saturno?

Y sin embargo y al mismo tiempo, todo, todos esos aspectos son importantes y ya será tu carta la que decide cuáles capta, cómo los moldea, qué experiencias te trae… y todo eso que tú ya puede imaginarte.

En fin. Lo mejor que puedo hacer es pedirte que me acompañes a este salto cuántico de la semana, compares, cotejes, comentes y experimentes por ti mismo/a.

Vamos. Lunes 13 —pre San Valentín y todas esas mandangas tontas— y con un cuarto lunar complejo (claro, la Luna va por Escorpio) que, si bien es verdad que tiene un trígono de Neptuno (la empatía, las musas, el Tarot, lo sublime y lo ideal) no acaba de sacudirse cierto dolor interno (Escorpio, Luna, el domicilio de Marte) y, encima, que Saturno ya la cuadra.

Hay un tema con lo hogareño que va a andar muy triste o pachucho esta semana. Lo mismo se produce algún tipo de pérdida familiar, lo mismo es un trabajo del que te bajan de nivel o te llena de responsabilidades, lo mismo hay que reparar unas roturas en casa, una puerta y su cerradura, un ordenador con todos sus costes, un accidente tonto pero de caras consecuencias. Algo planea  sombrío sobre los hogares, una suerte de luto, unos viejitos tristes o malogrados, obligación, corta rollo.

Claro, tanto Saturno en contacto con las luminarias, pues te lo tienes que comer con papas.

Pero vamos, que tampoco es para tanto.

Y claro: el Cosmos también tiene esta semana cosas muy buenas. Muy… jupiterianas —que sería el contrapunto de Saturno, esto es, las protecciones, la buena suerte, las amistades, la comodidad, el dinerito, la alegría de vivir y celebrar.

O si no, pregúntaselo al miércoles 15 —con la Luna todavía vital y feliz en Sagitario— y la conjunción anual, felicísima, espiritual, sutil, engatusadora, mágica y onírica entre Venus y Neptuno en los Peces y en el grado 24.

A ver: que esta conjunción se produce todos los años. El Amor del día a día se une al Amor más inmaterial y místico; el arte creativo cotidiano contacta con las musas y con cierto espíritu del tiempo; se tiene una sensibilidad única para lo mediúmnico, el Tarot, la conexión con otras almas desde un punto de vista emocional, energético, orgásmico chákrico y lo que tú quieras.

Una vez al año. Yeah.

Pero es que desde el 2022, justamente esa zona anda más contentita porque Júpiter en Piscis ya puso el abono necesario: es como que la tierra ya anda mega fértil y… claro, con un poquito de agua y de humedad (Venus) pues nacen rosas preciosísimas y de un perfume que te deja flipando. ¿Has visto cuánto empalago? Pues bienvenido al mundo de Venus-en-Piscis-conjunto-a-Neptuno-bajo-la-influencia-de-Júpiter. 

El grado, ¡recuerda el grado! El 24. Y si tienes Luna, Sol, Venus, Mercurio, Júpiter, el Ascendente… ¡el punto de la Fortuna! Pues date por suertudo y suertuda. Ea.

Eso sí, el 16 de febrero también tendremos otros otra dosis de Saturno. El Sol se junta a este planeta tan poco dado a las fiestas y las guasas. En Acuario. Grado 27.

De alguna manera lo que supone es un último apretón de tuercas, temas que afecten y puedan dañar al padre, a la profesión, incluso a la salud de los nativos y nativas que cumplan por la época. Pero ya se pasa. Saturno ingresa el mes que viene en Piscis y, queridos acuarios, el planeta censor, de la vejez, las canas y las limitaciones no volverá a daros la lata hasta dentro de casi 30 años. Lo habéis logrado. Ahoi, ahoi. 

Sigamos. El sábado 18 se nos acumulan los aspectos. Por un lado tenemos un sextil entre Mercurio y Júpiter, desde Acuario a Aries y sobre del grado 8 que viene a ser uno de los momentazos de este Mercurio.

Un sextil, por supuesto, no te va a arreglar la vida —y mucho menos si no te lo curras y pones un poquito de tu parte— pero como Mercurio es la mente y en Acuario gusta de cierto estudio y originalidad y además puede concentrarse bastante bien, pues con la ayuda de Júpiter ya tienes ahí un combo muy empollón, estudioso, sabio… y viajero también. 

Ideal para una visita a las montañas, una excursión a lugares más fresquitos, cierta aventura, sociabilidad e independencia. Muy lindo. Aprovéchalo.

Por otro lado y también el mismo sábado tendremos el ingreso del Sol en Piscis —ya casi a medianoche, al menos en este lado del globo.

A ver, pececillos: el año pasado, sobre todo los del último decanato, tuvisteis vuestras dosis de éxito, reconocimiento, viajes, quizá nuevos miembros que llegasen a la familia… y luego otro toque de éxito y más visibilidad y otro montón de cosas lindas. Bien.

Eso está genial y para los que cumplís por marzo pues maravilloso porque aún podéis seguir sacándole tajada a la magia, la zozobra y ese despiste maravilloso y periférico que tanto os característica.

Pero ay los Peces que cumplen a primeros de su signo. Esto es: los que empezáis a cumplir en febrero vais a tener que apretaros un poco las tuercas. Y de hecho va a empezar a notarse incluso con la Luna Nueva del día 20 (pero eso ya, para el próximo Astroboletín…. cliffhanger total, ¿eh?)

Y nada, acabaremos la semana con el aspecto del domingo 19. El sextil entre Venus y Plutón, desde Piscis a Capricornio y por el grado 29.

Como Venus anda tan agraciada por la zona, pues a nadie le amarga un Venus y a ella, en concreto, todo le viene divino. Con este sextil pues puede añadirle un toque de intensidad a las relaciones, voluntad y magnetismo en trabajos artísticos e incluso una especie de intuición apabullante a la hora de captar energías, señales, sincronías y atajos. Mucho pálpito para este aspecto y su poquito de caña sexual. 

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El resto te dejo que lo descubras, me lo cuentes y lo aprendas conmigo en los próximos cursos. Recuerda suscribirte a la tribu (viene con un Manual cósmico impecable y gratis) y da gusto que sigamos creciendo.

Y ahora sí, que tengas muy feliz y galáctica semana.

Que la fuerza del Cosmos te acompañe —y esas luces de allá arriba te guíen en el día a día.

Ahoi, ahoi.

E.